San Pedro La Laguna
El territorio de San Pedro La laguna estuvo ocupado desde la Época Prehispánica, antes de 1492 por el pueblo tzutuhil, que tenía su capital en Tziquinahá o Atziquinihá (actualmente Santiago Atitlan). Los tzutuhiles fueron conquistados por los españoles en 1524, cuando Pedro de Alvarado, con la ayuda de los cakchiqueles y mexicanos, derrota al rey Tepepul.
Los habitantes de lo que hoy es San Pedro La Laguna, al igual que el resto de pueblos vecinos, fueron tomados en encomienda por Pedro de Alvarado, quien se reserva para su beneficio personal los pueblos más ricos y productivos, entre ellos la zona Atitlán.
A la muerte de Alvarado (1524) la encomienda de Atitlán fue repartida por mitad entre ¡a real corona y el conquistador sancho de Barahona. Por el año 1,623, un nieto de Sancho, Pedro Núñez de Barahona, tomo posesión oficial de la encomienda de Atitlán, que comprendía los pueblos de Santiago, San Lucas Tolimán, San Pedro. San Juan, San Pablo, La Visitación de Nuestra Señora, Santa Cruz y San Marcos, así como otros pueblos que ahora pertenecen a Suchitepéquez.
Se estima que el pueblo de San Pedro La Laguna fue fundado en su actual emplazamiento por el misionero Francisco Fray Pedro de Betanzos, entre los años 1547 y 1550. El nombre Original era San Pedro, a secas. Posteriormente fue conocido como San Pedro Patzununá y en diversos documentos aparece como Tzununá, Zununá o Sununá. Aparentemente por el año de 1643 se principio a utilizar el apelativo «La Laguna», cuando un visitador, Antonio Lara, ordeno que todos los apellidos indígenas y los nombres geográficos fueran castellanizados.
Entre los años 1702 y 1704 residió en San Pedro La Laguna, como Cura Doctrinero, el célebre cronista Franciscano Fray Francisco Vásquez, autor de una de las más importantes obras históricas de la época colonial, la Crónica de la provincia del Santísimo Nombre de Jesús de Guatemala, de la Orden de N. 5. P. San Francisco, en el Reino de la Nueva España.
En la descripción geográfico moral de la Diócesis de Guatemala, escrita por el arzobispo Pedro Cortés y Larraz, en ocasión de la visita pastoral realizada entre 1768 y 1770, señala que la parroquia de San Pedro la Laguna contaba con alrededor de 1921 habitantes, todos indígenas, y que el pueblo tenía como anexos los de San Juan, San Pablo, San Marcos, Santa Clara y la Visitación. Sin embargo, un censo realizado en 1813, reporta 3865 habitantes.
El 17 de septiembre de 1824 la iglesia de San Pedro fue destruida totalmente por un incendio. El edificio fue reconstruido y vuelto a dañar por el terremoto del 2 de abril de 1902, que afecto grandemente la zona del lago de Atitlán.
Durante el periodo colonial San Pedro La Laguna perteneció al corregimiento de Atitlán, hasta el año 1730, cuando este corregimiento y el de Tecpán Atitlán o Sololá fueron reunidos en la Alcaldía Mayor de Sololá. Cuando en 1782 se creó el departamento de Quiché, entre los 21 municipios que permanecieron en Sololá figuraba San Pedro.
Un dato interesante es la relación que ha existido entre San Pedro la Laguna y Ja Aldea San Pedro Cutzan, del municipio de Chicacao que fue fundada a mediados del siglo pasado por sampedranos. Los habitantes de San Pedro Cutzán, según se pudo comprobar hace algunos años, se mantuvieron estrechamente ligados por vínculos de sangre y matrimonio a San Pedro La Laguna, e incluso muchas personas tenían vivienda en las dos poblaciones. Estos vínculos favorecieron también un activo intercambio comercial.
Pueblo organizado en tiempo de la colonia por los españoles aparece en el reino de Guatemala con el nombre de San Pedro: fue cabeza de curato en el Partido de Atitlán, revistiendo especial importancia por haber llegado a contar con 6 iglesias, 17 cofradías y 2,045 feligreses en tiempo colonial.
En 1836, aparece adscrito al Circuito de Atitlán, en el Estado de Guatemala, cuando se dispuso el sistema de Jurados para la Administración de la Justicia.
Origen del nombre: Su nombre obedece a San Pedro Apóstol de Jesús.
Día de mercado: Domingo.
Producción agropecuaria: Garbanzo, maní, chile guaque, verdura, café, aguacate, maíz .
En San Pedro hay una finca particular, San Tziapa, donde se cultiva en buena escala el café.
La pesca en el lago de Atitlán es una actividad que ocupa a tiempo parcial o total, a varios cientos de pescadores. El producto de la captura es destinado al consumo familiar y a la venta en el mercado.